Llega un día que caes en la cuenta que soñar
O incluso haber cifrado demasiadas esperanzas
(Además de irreversibles pérdidas de tiempo)
Fueron disimulados encubiertos actos de cobardía
Al constatar (a buen entendedor) que te entretuviste
Y que con eso no hiciste más que dejar meramente pasar
Infinidad de oportunidades para animarte a hacer lo que debías
O incluso haber cifrado demasiadas esperanzas
(Además de irreversibles pérdidas de tiempo)
Fueron disimulados encubiertos actos de cobardía
Al constatar (a buen entendedor) que te entretuviste
Y que con eso no hiciste más que dejar meramente pasar
Infinidad de oportunidades para animarte a hacer lo que debías
Y tal y como te expresas, sobran las palabras. Un abrazo
ResponderEliminarOsservazioni del tuo profondo, che ho molto apprezzato, per la sincerità.
ResponderEliminarUn caro saluto Carlos
Quedarse en el sueño tampoco es bueno, seguro que no materializas nada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Realmente son muy ciertas y profundas tus palabras, mientras soñamos y planificamos el tiempo se nos pasa irremediablemente y ahora a mí el tiempo se me está pasando demasiado rápido.
ResponderEliminarEste año siento que tus palabras son exactas a lo que viví, soñé y planifiqué mucho para hacer este año, pero lo inesperado me cambió totalmente el panorama y ahora siento estos últimos meses como algo lejano y a la vez de que el tiempo pasó volando, la vida quedó en pausa.
Perdón, me puse analítica de este mi tiempo, un abrazo grande y gracias por llevarme a pensar.
PATRICIA F.
Sonhar é bom o inesperado acontece,
ResponderEliminare é bom se preparar...
Um abraço, Carlos
Si tan solo supiésemos qué hacer y qué no hacer, cuándo ser más práctico o más soñador... Punzante reflexión amigo, me parece que lo mejor es ser compasivos, después de todo somos meros aprendices en un mundo cargado de riesgos y amenazas. Ni más ni menos que todo es parte del aprendizaje de la vida. Un abrazo para ti.
ResponderEliminarP A T Y
Qué razón tienes, a veces nos quedamos en mitad de la nada , sin saber muy bien por donde dirigir nuestros pasos, y pensando desperdiciamos un tiempo que es oro.
ResponderEliminarLa vida tiene sus misterios y uno es que a veces no sabemos el camino a elegir. Un fuerte abrazo.
Lo expresaste tan requetebién, que no tengo nada que comentar.
ResponderEliminarCómo saber cuál es el lugar correcto...?
ResponderEliminarSi, a veces estamos perdidos, podemos perder el camino, pero nos salva, no perder la esperanza.
Abrazo.
A veces solo nos toca seguir soñando a pesar de todo. Te mando un beso.
ResponderEliminarUna opinión muy proaáctiva que olvida la cuarta (no por importancia) ley de Newton: la del mínimo esfuerzo.
ResponderEliminarAbrazooo
Cierto, pero soñar es bonito, es un mundo de posibilidades que, precisamente por ser posibilidades, son todas perfectas... luego la realidad nos concreta, y siempre quedan un poco más feas que como las soñamos...
ResponderEliminarUn abrazo
Genial mejor no se puede expresar, a veces se nos pasa el tiempo pensando en sueños y quimeras... Besos buen día
ResponderEliminarCarlos,
ResponderEliminarTu poema, frágil y lúcido,
expresa cómo nuestros sueños pueden ocultar nuestros miedos
y hacernos perder la oportunidad de actuar.
Gracias por esta meditación que nos abre los ojos
a la importancia de actuar y aprovechar el momento.
Con toda mi admiración.
Besos.
Veronique
Amigo Perrotti, tu “Advertencia” es una pieza de lucidez que cala hondo. Admiro profundamente la precisión con la que desnudas esa trampa sutil del autoengaño disfrazado de sueño. Tu texto no solo alerta, sino que interpela con firmeza y sin concesiones.
ResponderEliminarGracias por recordarnos que el tiempo no espera y que la acción, aunque imperfecta, es siempre más valiente que la evasión.
Un abrazo con respeto y gratitud.
Carlos, hermoso poema.
ResponderEliminarCoincido con el comentario tan bien expresado de ETF, excelente.
Besos
Impecable, como siempre querido Carlos.
ResponderEliminarSoñar está bien, pero no es válido si no hay un propósito de enmienda, como el pecador que se arrepiente, si no se propone no volver a pecar de nada sirve su arrepentimiento, pues así el soñador si no tiene intención firme y eficaz de cumplir su sueño, entonces de nada servirá soñar, será una mera manera de abstraerse de la realidad que quizás no le guste, evadirse de lo que hay, imaginando lo que le gustaría vivir, un oasis en la insatisfacción. Soñar, siempre, pero hacer realidad lo que se sueña es un orgasmo casi espiritual, y acabar con la insatisfacción en la que se vive es un orgasmo terrenal.
Grande siempre, amigo.
Beso de esos
Como siempre impecable en tus certeros versos.
ResponderEliminarNunca defraudas,es más, dejás ese poso de sabiduría que alimenta nuestra mente y aligera el corazón al poder sentir que somos seres humanos falibles dentro de nuestra "perfección".
Maravilla!
Un abrazo enorme!
Una excelente advertencia, poéticamente elaborada con perspicacia y talento. Sin embargo, hay sueños que son completamente incompatibles con prudencia...
ResponderEliminar¡Sí, es cobardía!
Aplausos.
Gracias por sus condolencias, apoyo y cariño.
Que tengas un feliz y feliz septiembre.
Un grande abrazo, amigo Carlos.
~~~
'Agradable y feliz septiembre...'
EliminarEs triste comprobarlo. Pero quizás tenga remedio para lo que venga.
ResponderEliminarAbrazo
Y si esos sueños además, crearon expectativas, no solo perdimos el tiempo, sino que además no ocasionaron desazón al no cumplirlas. Un abrazo
ResponderEliminar