(Obra de Johnson Tsang)
Lo desconocido limita con lo indecible
Con tu impensado deseo de tan oculto encubierto
Con el turbio irrefrenable devenir del río del olvido
Con tu secreto asomando de tu abismo más íntimo
Con tu irreconocible rostro detrás de la última máscara
Ante el espejo más temido...
Con tu impensado deseo de tan oculto encubierto
Con el turbio irrefrenable devenir del río del olvido
Con tu secreto asomando de tu abismo más íntimo
Con tu irreconocible rostro detrás de la última máscara
Ante el espejo más temido...
Es impresionante, si miramos dentro de nosotros todo lo que nos podemos sorprender a nosotros mismos. Un abrazo.
ResponderEliminarLa obra de Tsang, que bien interpreta, aquello que nos desespera porque no podemos conocerlo, a pesar del esfuerzo. Mis respetos, tocayo. Carlos
ResponderEliminarAsusta más lo que llevamos dentro y deseamos arrancar. Impactantes versos para una contundente imagen. Un abrazo, Carlos
ResponderEliminarA veces, esa introspección, asusta.
ResponderEliminarUn abrazo.