viernes, 28 de octubre de 2016

1957 ---





Mil novecientos cincuenta y siete días hace que se fue
Y su ausencia permanece inalterable aquí conmigo
Así como las hojas en otoño se vuelven amarillas
El recuerdo nunca deja de volverse color olvido


¿Cuándo el porvenir podrá por fin venir de algún lado?
Sueños rotos, aire estrangulado, tiempo malherido
Todo lo que deseo son meros ecos de lo perdido
Tal vez porque sólo se pierde lo que se creía ganado


Ojalá el pasado fuera algo que en verdad ha pasado
¿Para qué quiero el mañana si no vas a estar allí para hacerlo realidad?
Una cosa es sentir como una eternidad tu ausencia
Y otra muy diferente sentir la ausencia de eternidad





12 comentarios:

  1. Más de 3000 días hace que partió, sé de ausencias, de vacíos, de soledad, añoranza y dolor.
    Ante el destino y la ley impuesta de vida, nada se puede hacer.
    Pero hay algo en tu poema que me ha llegado muy hondo, es cuando dices:"EL RECUERDO NUNCA DEJA DE VOLVERSE COLOR OLVIDO"
    Muchas veces me he preguntado: ¿Qué sería de mí si me faltasen los recuerdos? Con los años, me da tanto miedo perderlos...
    Cariños.
    kasioles

    ResponderEliminar
  2. Bello en su desolación.
    Trece días desde que se fue y aún no he aterrizado del todo.
    Me uno a este canto a la ausencia.

    Un poema, Carlos, infinitamente bueno y...tan triste que desgarra las lianas del corazón del mundo.

    Un abrazo grande
    Ana

    ResponderEliminar
  3. Gracias, Kasioles. Un verso que conmueva a alguien es todo lo que pido. Un abrazo.

    No me olvido de tu último escrito. Gracias de nuevo.

    ResponderEliminar
  4. Así salió, Ana. Calculé los días, jugué con las palabras y los tiempos, busqué dos fotos en mi archivo que "redondearan" lo que quería decir. Eso fue todo. Abrazo grande y muy agradecido.

    ResponderEliminar
  5. "Sueños rotos, aire estrangulado, tiempo malherido"

    Ese verso.

    ResponderEliminar
  6. Gracias, Juan. Un verso, sólo uno, para dejar constancia de cómo se siente.

    ResponderEliminar
  7. Profundo y emotivo.
    Ausencia de eternidad...

    Besos Carlos.

    ResponderEliminar
  8. Así salió. Son de esas cosas que uno no quisiera tener que leerse. Pero de sinceridad se trata y así salió. Gracias, Adriana.

    ResponderEliminar
  9. Qué bello y qué tierno, Carlos.

    Es posible que nunca se haya ido. Que esté ahí, contigo, inmaterial y sin tiempo, pintándote de oro los otoños y colgando en tu frente esos recuerdos...

    un abrazo muy fuerte

    ResponderEliminar
  10. Gracias, Soco. Así salió, así siempre suele salir. Alguna vez lo lograré trasmitir.

    Hermoso comentario. Un gran abrazo.

    ResponderEliminar
  11. Vuelvo sobre este poema inmenso. Es triste, pero bello.

    Un beso enorme, amigo

    ResponderEliminar