A veces duele, no tanto sufrir
Más duele no sentir
Es decir no saber
No volver a recordar
O no poder renovar lo que ya fue
Lo que a menudo
Aún sin palabras yo sé
No saber
Es como un rastro de ausencia en la niebla
Apenas eso
Un momento en el que no queda tiempo
Ni espera siquiera
No saber
Lo que no es
Lo queda en la órbita del mero deseo
Tal vez
De alguna manera
Lo que no puede ser
Como un hecho cualquiera que no puede suceder
Y que es otro hecho a la par
También
Como soñar
Un hecho sin origen
Sin margen ni horizonte sin fin ni más allá
Y que duele como antes jamás
Como nada después
No saber
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ResponderEliminarAgradecido, Gato. Me lo disparó encontrar esa foto. No es bella?
ResponderEliminarSugerente el poema. Y la foto.
ResponderEliminarMe ha llamado la ateción el texto de Céline.
Agradecido, Juan. Céline solía mencionar a Bébert. Lucette, su mujer, se sabía la segunda en cuestión, y alguna vez dijo que Céline en su agitada vida "adonde huyó jamás se separó de su gato..."
ResponderEliminarPosiblemente, y digo posiblemente porque entre tanto bueno que nos has ido regalando (generosamente:) no sería justo ni fácil elegir o quedarse con uno de tus poemas, pero este, esto... este, buf.
ResponderEliminarSí, es raro, me gustó más cuando salió, menos cuando lo subí y ahora algo más nuevamente. Mañana no sé.
ResponderEliminarPero, como sea, agradecido.
Pues yo sigo con el "buf"
ResponderEliminarYo también.
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