Huye el día
Otra vez reanuda
La travesía
Jadea su luz
En medio de la noche
Agazapada
Casi animal
Merodea furtiva
La oscuridad
Donde palpitan
Las siemprevivas sombras
Que la habitan
Y cambian la piel
Para de nuevo volver
A amanecer
(Fotografía Hiroshi Sugimoto)
A veces duele hasta el aire que respiramos.
ResponderEliminarMe han encantado todos los versos, son preciosos, pero me quedo con éste:
***La luz jadea
En medio de la noche
Agazapada***
Un placer siempre leerte amigo Carlos.
Besos y feliz tarde.
Feliz mañana .desde el calor de Miami
ResponderEliminarun abrazo
Así vinieron e intenté justificarlos más como poema que como haikus aislados. Adónde va la luz cuando reina la sombra. Algo así.
ResponderEliminarUn placer siempre mío, María, y muchas gracias.
Besos y abrazos también felices.
Muchas gracias, Mucha, feliz siempre de saber de vos. Abrazo caluroso desde el invierno de tu Buenos Aires...
ResponderEliminar¡Ah, los haikus de Carlos!
ResponderEliminarEfctivamente no tan inconexos, para quien lo quiera ver o sea capaz de verlo.
Oye, ¿vos no serás japonés?
Muchas gracias, Juan. Así salen. A veces salen...
ResponderEliminarNo ahora, pero en alguna existencia anterior creo que sí, quiero creer que sí. Después de todo la fe o la ideología o cualquier idea en realidad se basa en eso. Somos lo que creemos o vemos lo que creemos, no?
Muchas gracias de nuevo.
Nada de inconexos y perfectamenre Haykus. Has logrado un bello poema, siguiendo la trayectoria de la luz.
ResponderEliminarExcelente el segundo, como haiku y como estrofa. Besosmil
(un día de estos te mandaré correo)
Les encontraba cierta falta de encastre al final, pero los subí igual, porque así salieron. Muchas gracias Soco, que se haya entendido el propósito de describir ciertas instancias que atraviesa la luz ya me deja conforme.
ResponderEliminarAbrazo. (claro, cuando quieras) Gracias de nuevo.
Me encantan los haikus, pero soy incapaz de producir ni siquiera uno.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ambar
Muchas gracias, Ambar, yo diría que no es cierto, leyéndote se encuentran infinidad de haikus o casi haikus, a algunos versos sólo es cuestión de cambiarles alguna palabra, tal vez buscarle un sinónimo para no perder el sentido que intentas darle...
ResponderEliminarAbrazo como siempre agradecido, Ambar.