Hebras de nieve
Se mecen en el aire
Como un polen
Llueven del cielo
Tienen color de luna
De ella vienen
Danzan desnudas
Salpicando el verdor
Se desvanecen
Sobre el lobo
De frondoso pelaje
Que es el bosque
Cala el viento
Cala el viento
Aúlla en la noche
Resplandeciente
Tú en otra vida debiste ser el abuelo de Yasunari Kawabata.
ResponderEliminarQué bárbaro manejas los haikus!
Gracias, Ning. Cuánto debo aprender de tipos como él... El tercero tardó pero los otros fueron casi instantáneos. Gracias de nuevo.
ResponderEliminarHermosos haikus, llenos de magia, romanticismo y profundidad!
ResponderEliminarMe encantan los lobos, son animales bellos e inteligentes, estuvieron a punto de extinguirse, como la naturaleza "salvaje" de las mujeres... Clarissa P. Estés se inspiró en ellos para escribir su libro "Mujeres que corren con los lobos".
...Los lobos sanos y las mujeres sanas comparten ciertas características psíquicas: una aguda percepción, un espíritu lúdico y una elevada capacidad de afecto. Los lobos y las mujeres son sociables e inquisitivos por naturaleza y están dotados de una gran fuerza y resistencia. Son también extremadamente intuitivos y se preocupan con fervor por sus vástagos, sus parejas y su manada. Son expertos en el arte de adaptarse a las circunstancias siempre cambiantes y son fieramente leales y valientes...
Genial Groucho en tu gaterío!
Besos Carlos y feliz Febrero.
Y el romance llego a tu vida impregnándote de armonia
ResponderEliminarecribiendo bello vas y vuelves por los cielos
Gracias, Adriana. Así salieron. Me gustan, sí, excepto el tercero: podría haber estado mejor.
ResponderEliminarAcabo de bajarme un pdf del libro de Clarissa (las casualidades no existen, evidentemente debo leer ese libro) del que no hace mucho leí fragmentos en un blog que sigo habitualmente: http://elrincondemisdesvarios.blogspot.com.ar/2014/08/clarissa-pinkola-estes-mitos-y-cuentos.html
Groucho siempre tiene algo diferente para decir, no?
Abrazo feliz, Adriana, siempre buena guía del conocimiento que no debemos dejar pasar...
Gracias, Mucha. Siempre tus palabras generosas y estimulantes, fluyen naturales y sinceras como vos.
ResponderEliminarHebras de nieve
ResponderEliminarSe mecen en el aire
Como un polen
Llueven del cielo
Tienen color de luna
De ella vienen
Fantásticos. Los recordaré cuando comience a nevar por aquí, que creo que será en breve. En mi tierra conocemos muy bien la nieve, somos sus aliados.
Los envidio. Alguna vez nevó sobre Buenos Aires. Si vieras la gente buscando las plazas y parques de la ciudad para retratarse o hacer algún muñeco. Hija de la luna es la nieve. Gracias, Juan.
ResponderEliminarLa nieve es bonita, a mí me gusta, quizá porque nací en pleno mes de enero con una nevada importante, según me contaron. Pero no creas, la nieve también es peligrosa. Por aquí se ha dicho siempre: "¡Qué blanca es la nieve, pero qué negra!". Ahora tenemos suficientes medios para controlarla, pero cuánta gente ha quedado en medio de una tormenta de nieve en pueblos cercanos que quedaban aislados...
ResponderEliminarAquí para ver algo de nieve tenemos que viajar bastante, atrae su sola existencia, seduce experimentarla, pero claro, es peligrosa, como buena mujer.
ResponderEliminarPor cierto, habrás cumplido años hace poco, feliz cumpleaños entonces, aunque atrasado... El año pasado sí recuerdo haberte saludado por eso. Salud!
Muchas gracias.
ResponderEliminarPor aquí son famosas las historias (reales) de gente que se ha quedado dormida para siempre (la nieve te duerme) a escasos metros de su casa, perdida por falta de referencias, una buena nevada te borra todas las referencias. Afortunadamente hoy, con los medios de que disponemos (palas quitanieves, etc.), eso es difícil que vuelva a ocurrir.
Es que ya no sé qué decirte, Carlos,
ResponderEliminarBailan desnudas
Salpicando el verdor
Se desvanecen
cuánto (s) sentido (s) y cuánta belleza comprimida en un 575.
Cuando yo nací también estaba todo nevado, hala:)
ResponderEliminarMira qué bien, oye.
ResponderEliminarEso debe marcar carácter, eh:)
ResponderEliminarSeguro, seguro.
ResponderEliminarQué forma poética de dormirse para siempre, Juan. Muy bellamente expresado.
ResponderEliminarSí, es increíble, se aúnan las palabras que disparan esos sentidos y salen, toman forma, son posibles, por el aliento (inspiración) que uno recibe de ustedes... Gracias, Marian.
ResponderEliminarMe encantó. Besos.
ResponderEliminarGracias, Amapola Azzul. Igualmente.
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