Poema de haikus para Gato
Como un ojo
En el azul silencio
Abre la luna
Mientras la bruma
Se atasca nocturna
Entre las ramas
No hay un alma
La calma con su manto
Cubre las aguas
Silba el viento
En lo alto del verso
Tan claro pienso
Estoy agradecido, asombrado y confundido.
ResponderEliminarLo guardaré al fondo a la izquierda.
Yo también tuve una suerte de asombro. Salió el primero, nítido, y creí que ahí se terminaba la cosa porque iba a escribir un haiku. Pero de inmediato salió el segundo y luego el tercero y el cuarto. El único cambio que hice fue poner como cuarto haiku el tercero para darle un final que queda como medio abierto, a mi juicio. El agradecido soy yo.
ResponderEliminarPor otro lado, mira-miren Whiplash, la vi anoche. No te-se la pierdas-pierdan.
Buen final. Abierto, como los buenos finales... sin final.
ResponderEliminarNo conozco "Whiplash", pero tratándose de una película sobre el jazz, habrá que verla.
Gracias, Juan. El hombre inventó el final (y los comienzos) porque necesitó pensar las cosas en esos términos.
ResponderEliminarCreo que esa peli no te defraudará.
¿Dónde están los comienzos? ¿Dónde el final?
ResponderEliminarNada comienza ni termina. Todo fluye, es decir, continúa.
ResponderEliminarSinceramente, nada me interesa más que estos juegos del Tiempo.
Magníficos, Carlos. Ya puede estar orgulloso Gatopardo (se nota que te inspira más:)
ResponderEliminarEn lo de los "principios" y "finales" no estoy de acuerdo al cien por cien. Hay cosas que tienen un claro principio y un claro final.
ResponderEliminarPara una película, desde luego, no hay nada más acertado e interesante que un "final abierto".
Gracias. Marian. Pero si algo no se domina es el envión. Quedo en deuda con vos...
ResponderEliminarEn cuanto a la peli, la he visto hace unos días, y, la verdad, siempre bajo mi punto de vista, a pesar de estar bien hecha y con buenas interpretaciones, me parece más del tipo de sargento de marines exaltando los valores yanquis, que una verdadera película de jazz.
ResponderEliminarDe hecho la anécdota del plato no es del todo verídica, ya que el plato se lo tiró al suelo un saxofonista en la primera Jam de Parker, y no Jo Jones a la cabeza como se indica en la peli.
En fin, eso no quiere decir que no haya que verla, y además es mi opinión al respecto.
La que sí que recomiendo es Relatos Salvajes.
Por cierto, orgulloso se queda corto...
ResponderEliminarBuen análisis. Agradecido por la data. Es cierto que los yanquees ponen esa visión Reto al Destino, pero me enganchó.
ResponderEliminarEsto es cuestión de gustos, he leído críticas muy positivas de expertos en jazz. Dicho lo cual, como debe de ser, allá cada uno con sus gustos.
ResponderEliminarSeguro, pero también es cierto que contiene esa clase de licencias que suelen tomarse los guionistas como la inclusión de la anécdota de la jam de Parker que citabas y con las que se pierde rigurosidad histórica.
ResponderEliminarYo la volví a ver y refrendo, me gustó la peli, y las actuaciones todavía más. Hay un costado de drama personal en el personaje del "sargento instructor" que lo pone a otro nivel. En fin, como dices, son gustos, y sobre lo que nos gusta escribimos bastante.