Muchas gracias, ReltiH. Así vino a las 11:11, intenté algún cambio pero al final lo dejé como me vino a la mente. No sabía con qué ilustrarlo hasta que encontré el cuadro de Dalí que él mismo explicó de esta manera: "Soy yo a los seis años, cuando pensaba que era una niña, levantando con extrema precaución la piel del mar para espiar a un perro durmiendo a la sombra del agua..." Un genio, verdad?
El cuadro de Dalí le complementa de maravilla a tu escrito. Cuando algo llega, a la hora que sea, no siempre es posible cambiar o rectificar. Eso que el corazón quiere decir, es lo que dice. Profundas letras para reflexionar. Un buen día y un abrazo. Ambar
Muchas gracias, Adriana. Seguramente (pero eso ocurre ni antes ni después) voy a apelar a tu frase (la impermanencia de la sombra) cuando tome forma el poema que ya mismo me ronda.
¿Fue el cuadro de Dalí el que te ha inspirado el Haiku de la sombra? La niña proyecta su sombra alejada de sus pies, puede que flote o sueñe su sombra y la eleve, también el perro parece dormir buscando la sombra de esa lengua de mar. Las sombras saben mucho de nosotros, son nuestras mejores confidentes, jamás nos reprocharán nada pero, soñando o dormidas, nos perseguirán siempre. Amigo mío, al leerte hoy me has recordado a Góngora, te lo digo porque él sólo escribía para una élite ¡y pensar que la atrevida de Kasioles se mete a comentar algo que no entiende...! Sólo venía con el pretexto y la buena intención de desearte buenas noches. Cariños. kasioles
El mundo cada vez más necesita de los sensibles creativos solidarios atrevidos, Kasioles. Muchas gracias por tus alentadores inspiradores comentarios de siempre...
Muchas gracias Isaac, por tu visita. Ya mismo me paso por tus blogs que se ven muy interesantes. Un poeta que además puede ilustrarse con sus pinturas es siempre alguien muy interesante.
Un Haiku para reflexionar. La vida es sueño...dicen. Hay un momento en el que no sabemos si la vida cotidiana es el sueño (vivimos como autómatas haciendo cosas absurdas a veces) o los sueños y utopías que nos mueven en lo profundo son la vida verdadera. Yo creo que todo es vida. Lo real y lo soñado. Al final navegamos en una mezcolanza de planos...
Muchas gracias, Ana. Soñar también es un hecho, ergo, también es real... "Al final navegamos en una mezcolanza de planos", sería necio agregar algo más. Chapeau!
INGENIOSA PROFUNDIDAD.
ResponderEliminarABRAZOS
Muchas gracias, ReltiH. Así vino a las 11:11, intenté algún cambio pero al final lo dejé como me vino a la mente. No sabía con qué ilustrarlo hasta que encontré el cuadro de Dalí que él mismo explicó de esta manera: "Soy yo a los seis años, cuando pensaba que era una niña, levantando con extrema precaución la piel del mar para espiar a un perro durmiendo a la sombra del agua..." Un genio, verdad?
ResponderEliminarAbrazo agradecido.
Paradojas "made in Perrotti".
ResponderEliminarSugerentes paradojas.
ResponderEliminarEl cuadro de Dalí le complementa de maravilla a tu escrito.
Cuando algo llega, a la hora que sea, no siempre es posible cambiar o rectificar.
Eso que el corazón quiere decir, es lo que dice.
Profundas letras para reflexionar.
Un buen día y un abrazo.
Ambar
Como el rocío, la impermanencia de la sombra también se desvanece.
ResponderEliminarBellísimo.
Abrazos Carlos.
Muchas gracias, Juan. Había estado leyendo a Píndaro... Seguramente de lo debo a él.
ResponderEliminarMuchas gracias, Ambar. "Eso que el corazón quiere decir, es lo que dice." Nítida reflexión.
ResponderEliminarDalí cierra el círculo siempre. Abrazo agradecido.
Muchas gracias, Adriana. Seguramente (pero eso ocurre ni antes ni después) voy a apelar a tu frase (la impermanencia de la sombra) cuando tome forma el poema que ya mismo me ronda.
ResponderEliminarComo dice Gilberto Gil, aquele abraço, Adriana.
¿Fue el cuadro de Dalí el que te ha inspirado el Haiku de la sombra?
ResponderEliminarLa niña proyecta su sombra alejada de sus pies, puede que flote o sueñe su sombra y la eleve, también el perro parece dormir buscando la sombra de esa lengua de mar.
Las sombras saben mucho de nosotros, son nuestras mejores confidentes, jamás nos reprocharán nada pero, soñando o dormidas, nos perseguirán siempre.
Amigo mío, al leerte hoy me has recordado a Góngora, te lo digo porque él sólo escribía para una élite ¡y pensar que la atrevida de Kasioles se mete a comentar algo que no entiende...!
Sólo venía con el pretexto y la buena intención de desearte buenas noches.
Cariños.
kasioles
Sueña,
ResponderEliminarsueña el que sueña,
o el soñado?
Luz&Armonía
Isaac
El mundo cada vez más necesita de los sensibles creativos solidarios atrevidos, Kasioles. Muchas gracias por tus alentadores inspiradores comentarios de siempre...
ResponderEliminarAbrazo, buenas noches y buena vida!
Muchas gracias Isaac, por tu visita. Ya mismo me paso por tus blogs que se ven muy interesantes. Un poeta que además puede ilustrarse con sus pinturas es siempre alguien muy interesante.
ResponderEliminarUn abrazo!
Que todos tus sueños sean dulces como el algodón.
ResponderEliminarAbrazos
mar
Como mi gato Algodón. Muchas gracias, Mar. Genia!
ResponderEliminarAbrazos!
Soñamos o somos el sueño de otro?...
ResponderEliminarBello, misterioso y perfecto, tu haiku. Besosmil
Muchas gracias, Soco. Me estimuló Píndaro pero todo me sale borgeano si se trata de un sueño.
ResponderEliminarAbrazo...
Un Haiku para reflexionar. La vida es sueño...dicen. Hay un momento en el que no sabemos si la vida cotidiana es el sueño (vivimos como autómatas haciendo cosas absurdas a veces) o los sueños y utopías que nos mueven en lo profundo son la vida verdadera. Yo creo que todo es vida. Lo real y lo soñado. Al final navegamos en una mezcolanza de planos...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Ana
Muchas gracias, Ana. Soñar también es un hecho, ergo, también es real... "Al final navegamos en una mezcolanza de planos", sería necio agregar algo más. Chapeau!
ResponderEliminarUn abrazo aún más fuerte.