Si no lo sé
Llego a percibirlo
Cuando lo pienso
Se esfuma
La estela que traza en el cielo una estrella fugaz
El
rocío que se apaga con los primeros guiños del sol
Esa
cálida pátina que en la boca me deja el coñac
Bucles
de humo desvaneciéndose en el aire
Las
huellas que sobre la arena barre el mar
Una
bocanada de tu aliento empañando el cristal
La frágil edad de tus pétalos
La
presencia de tu ausencia
La permanente impermanencia
Es tal la fugacidad
Que ni siquiera llega a ser del todo cierta la verdad...
Poema de lo inefable.
ResponderEliminarHay cosas, situaciones, sentimientos, que cuando intentamos explicarlos por medio de la razón se nos disuelven como un azucarillo o se volatilizan como una pompa de jabón.
Me quedo con el poema, pero sobre todo con estos versos:
"Si no lo sé
Llego a percibirlo
Cuando lo pienso
Se esfuma"
Tiene cierto aire oriental, nipón o chino. Al menos a mí me lo parece.
ResponderEliminarCon todas estas sensaciones (y más) hemos ido notando que estamos vivos.
ResponderEliminarAunque también se puede estar muerto en vida, que además de ser una frase hecha, es cierta.
ResponderEliminarYo también, Juan, me quedo con ese inicio. El resto intenta permanecer con esa fuerza pero impermanece, se diluye...
ResponderEliminarIntenta ése espíritu chino o nipón, Gato. A veces se consigue aproximar, pero aún no logro siquiera empatar a esos maestros.
ResponderEliminarAlgo de eso que decís, Marian, formaba parte de un verso final que no terminó de salir. A veces la fugacidad que percibimos evoca, no sé si es la palabra, la impermanencia que vivimos, o algo así.
ResponderEliminarAproximar es demasiado, Gato. A veces se consigue ir en esa dirección, apenas eso...
ResponderEliminarQue ya es bastante.
ResponderEliminarAnoche veía un documental sobre Turner. Uno intenta aprender copiando, como los pintores, hasta que un día logre hacerlo.
ResponderEliminarOtro fenómeno el amigo Turner. Han estrenado una película sobre su vida con muy buena pinta.
ResponderEliminarAquí todavía no. Un genio en todas sus etapas. Sus últimas obras en las que disuelve formas y paisajes, en las que el color aparece cubierto de neblinas, son estremecedoras.
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ResponderEliminarEsa es la deficinicón, estremecedor.