(Collage de Matt Wisnievski)
Huele a verde el bosque
Un alarido húmedo y espeso ahoga la tarde
Tañe la luz escurriéndose entre las altas hojas de los
árboles
Brotan infinitos acordes que afinan en jade
Anda inmóvil la soledad en el muelle
Lejos unos patos hienden el espejo de aguas en calma
Mientras paladeo en mi recuerdo cada partícula de
tu aroma
El crepúsculo se vuelve de color lágrima
Una barca arruga la superficie del lago como un
lienzo
Pliegues concéntricos van a disolverse sobre la
orilla en vano
La brisa flamea y me envuelve como si fuera un vals
Zumba el silencio colmado de tábanos
No hay mejor destino que estar en camino
Ya la bruma pincela el aire en sombras que la noche esparce
Es tan cierto que nunca te vi como que te soñé hasta
el delirio
No sé cómo llegué aquí pero no estoy perdido
Una barca arruga la superficie del lago como un lienzo
ResponderEliminarPliegues concéntricos van a disolverse sobre la orilla en vano
La brisa flamea y me envuelve como si fuera un vals
Zumba el silencio colmado de tábanos
Magnífico. Casi parece una síntesis de varios haikus, o yo al menos le veo la misma atmósfera.
"No sé cómo llegué aquí, pero no estoy perdido"
Esa foto que veo abajo de Lauren Bacall con dos gatos me la llevo, te pongas como te pongas.
ResponderEliminarGracias, Juan. Yo siento eso mismo. Esa atmósfera se me repite, me sale natural...
ResponderEliminarLauren, bella y magnética, con o sin gatos. Difícil situación la nuestra, hermano.
Que belleza!
ResponderEliminarJamás podrías perderte transitando el camino de los sueños.
Besos y regalo:
El fuego y sus misterios.
Yo conocí el secreto del fuego
mucho antes que el primer
bosque se incendiara.
Antes aún de aquella hoguera,
antes de la llama.
Como todos los hallazgos
fue accidente,
tropezar con la chispa en tu palabra,
y después, ¿qué remedio?:
encenderme
con el roce casual de tu mirada.
Aída E. Párraga
Se nota lo natural.
ResponderEliminarA ver cómo arreglamos lo de Lauren Bacall :-)
Gracias, Adriana, una vez más. Así salen las cosas, por el camino de los sueños.
ResponderEliminarNo conocía la poesía de Aída. Debo enmendar eso de inmediato. Como siempre, iluminador regalo.
Si te la cedo pruebo que yo más la quiero... Pero no puedo!!!
ResponderEliminarMe tomé el atrevimiento de enviarte una bellísima foto de "Gato mirando al Sudeste" así se me ocurrío denominarla, porque desconozco al autor...la encontré en la web...no se si te habrá llegado tome direccion que figura en tu correo.
ResponderEliminarCreo que te va a encantar, para tu sección "Gaterío".
O simplemente para agregarle tus letras.
O simplemente para guardarla en tu carpeta de fotos....
ResponderEliminarLa libertad es libre jajaja.
Muy buena idea, Adriana. Me lo mandaste a carlosperrotti@argentina.com? No tengo más ese mail. Por favor enviámelo a carlosalbertoperrotti@gmail.com
ResponderEliminarMil gracias.
Eso es disfrutar de las bellezas que nos da la vida con los ojos del alma, sin mente ni razón...desde un lindo corazón.
ResponderEliminarUn abrazo para ti.
mar
Eso es, de corazón. Gracias, Mar. Otro para vos.
ResponderEliminarPlacer visitarte y deleitarme con tus palabras y lo que sientes
ResponderEliminarGracias, Mucha. Me encantó tu última entrada. Es una crónica sincera y descontracturada y, como siempre, buena onda.
ResponderEliminarMuy buen poema, Carlos, me alegro mucho, amigo. "No hay mejor destino que estar en camino."
ResponderEliminarUn abrazo,
Manuel
Así salió, Manuel. Me alegra también y te agradezco. Más viniendo de un gran poeta como vos.
ResponderEliminarHola Carlos, cuando intento enviarte correo, me vuelve automáticamente un aviso de acto fallido,
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carlosalbertoperroti@gmail.com
No problem....otra vez será.
Besos.
Por favor, Adriana, enviámelo a enideinau@yahoo.com.ar o carlosperrotti1@gmail.com
ResponderEliminarGracias de nuevo.