Aquí viene el
mar
Un oleaje de
cascos y relinchos
Arrecia sobre
la playa mansa
Oculto entre
las crines del viento
Neptuno lanza el ataque final
Sus huestes ya invaden la tierra
Cabalgan el último atardecer
Cabalgan el último atardecer
En briosos
corceles de espuma blanca
Aquí viene el
mar
Cuando abrí
los ojos esta mañana
Qué iba a imaginar que no volvería a
despertar
Uyyy que lindo!
ResponderEliminarGalopamos de mar en mar Carlos....caballos salvajes de espuma, sedientos de sal.
¡La pucha que vale la pena estar vivos!
Me encantó.
Muchos besos y buen comienzo de semana.
Here comes the sea!
ResponderEliminarEstupendo poema y muy adecuadas ilustraciones ("caballos salvajes de espuma...")
Gracias, Adriana. Igualmente. Decían Pessoa y Caetano que está llegando a Buenos Aires: navegar es preciso!!!
ResponderEliminarGracias, Juan. Así salió ni bien vi esas magníficas imágenes de Walter Crane, a quien le debo este "Aquí viene el mar".
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