Una melodía de manantial
Canción verde como la sal
Como la sed, como la tarde
Mientras la niebla asciende
Entre una marea de árboles
Aves de nácar pintan el cielo
De viento inmóvil su plumaje
De silencio su canto de oleaje
Rompiendo contra las rocas
Salpicando de brasas de mar
Las eternas arenas del paisaje
Lo veo todo desde tus ojos
Cada lágrima, cada gota de lluvia
Revoloteando, como luciérnagas
Salpicando el aire, la piel encendida
de este instante, mientras lo veo todo
Desde el promontorio de tu alma
Donde retumba el silencio
Que nadie puede hacer callar
Ensordeciendo la oscuridad
Que anda rondando ahí fuera
Cada lágrima, cada gota de lluvia
Revoloteando, como luciérnagas
Salpicando el aire, la piel encendida
de este instante, mientras lo veo todo
Desde el promontorio de tu alma
Donde retumba el silencio
Que nadie puede hacer callar
Ensordeciendo la oscuridad
Que anda rondando ahí fuera
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