Al otro lado del espejo
El cuerpo persigue a su sombra
Sólo el silencio te nombra
Los pájaros le abren la jaula al viento
Al otro lado del espejo
El otoño deviene en primavera
Ni el Tiempo es lo que era
Y el infierno cae al abismo del cielo
Al otro lado del espejo
La respuesta se llena de preguntas
Gana invariablemente la derrota
La victoria es siempre derrotada
Al otro lado del espejo
La imagen oculta más de lo que devela
La que lo enmascara todo es tu mirada
Es la que ciega la imagen verdadera
Al otro lado del espejo
Incluso el antes viene después
Lo que ves, definitivamente no es
Las cosas no son, parecen
Al otro lado del espejo
Nada ni por un instante permanece
Los opuestos no son tales
Sino supuestos y hasta iguales
Al otro lado del espejo...
Es un dilema poético, lo que hay detrás del espejo, es misterioso y no se revela a profanos, voy bien Carlos? Un abrazo cariñoso"
ResponderEliminarMejor que yo seguro, Carmen. Eso me pregunto: si ese otro lado es interno y por lo tanto está "adentro" del espejo o si existe en un lado inverso que está más allá, es decir detrás (y afuera?) de la misteriosa superficie llamada espejo...
ResponderEliminarMuchas gracias y abrazos, amiga.
Seguimos escribiendo mientras los blogs se duermen por el verano del norte...
ResponderEliminarTe vas abriendo de a poco
La vida es cruel pero bella
Abrazos poeta
Muchas gracias siempre Mucha... Y absolutamente todo a la vez. Abrazos y más abrazos.
ResponderEliminarDesde que Lewis Carroll, Cortázar y otros nos descubrieron que había un lado de allá seguiremos intentando descubrir qué hay al otro lado del espejo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Juan. Fue la frase de Julio sobre "el lado de allá" la que me disparó este poema...
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