viernes, 1 de noviembre de 2024

Tanka elegíaco ---

 




Lo impensable
Es el hecho desnudo
Que la poesía
Arropa con sonoras
Metáforas sin margen


Bolsa de Gatos 1181/1190

 




1190. “¡¿Qué son los gatos?! decía yo cuando entré como diputada. Soy recuriosa, me interesa todo: Gente, Hola y leo a Platón. La frivolidad es un gran descanso. ¿Qué es un gato?, empecé a preguntar. ‘Son chicas acompañantes, acompañan a los diputados’, me explicaron. Un día voy en el ascensor y descubro un gato –porque era un gato–. Bajo y grito ‘un gato, un gato’. El ascensorista empezó a buscar... Ahora veo gatos sentados en las bancas, antes eran acompañantes, después fueron asesoras y ahora son diputadas. Yo no digo que no estén porque uno puede educarse, ¿no? pero por lo menos que se formen. Los gatos nos invaden”. Elisa Carrió, en diálogo con el youtuber Rosendo Grobo, politólogo, hijo del zar de la soja Gusavo Grobocopatel, describió sin precisar nombres el paisaje del Poder Legislativo. Después de casi 26 años en el Congreso y a más de cuatro años de haber abandonado la política, la líder de la Coalición Cívica empezó a desandar el camino para volver al palacio.” ("Gatos”, en el Pirulo de tapa de Página12, por Elisa María Avelina Carrió, más conocida como Lilita, abogada, catedrática universitaria, constituyente y política argentina que se desempeñó como Diputada de la Nación y construyó y derrumbó varios partidos y alianzas políticas; polémico personaje de la argentinidad sociopolítica; en la foto publicada en Tweeter en agosto de 2016 junto a su gata Frida)





1189. “A principios de los años 30's del siglo pasado el actor y director de cine Charles Laughton llegó a Hollywood con su esposa, la actriz Elsa Lanchester, (célebre por su papel principal como 'La Novia de Frankestein'), y fue de inmediato contratado por los grandes estudios para realizar varias películas, aunque con el paso de las semanas, feliz como estaba atareado en sus labores, al regresar a su casa notó que su esposa se sentía sola mientras esperaba que desde algún proyecto teatral o de cine la convocaran, por lo que decidieron adoptar un gatito negro muy juguetón al que llamaron Nero (cabe destacar que por esos días Laughton interpretaba al alegre desquiciado Nerón en 'La Señal de la Cruz') y el que sería el primero de una larga lista de mininos que tendrían en su hogar. A partir de ese momento la pareja se hizo fanática de los gatos, iban a exposiciones gatunas, leían y estudiaban sobre gatos de diferentes razas; inclusive se dijo que Elsa influenció a Laughton para que consiguiera los derechos para montar un espectáculo basado en “Old Possum’s Book of Practical Cats” de T.S. Eliot, el cual no se concretaría por la inexplicable negativa del poeta. El director cinematográfico Jean Renoir cuenta en sus “Memorias” que a Laughton le decían cariñosamente «el gran gato», apodo del que se sentía orgulloso imitando maullidos y ronroneos entre los presentes como demostración. Los gatos fueron una constante en la vida privada y profesional de Laughton y Lanchester. Por ejemplo, en la película “This Land Is Mine”, dirigida justamente por Renoir, el gato que aparece allí es uno de los gatos del matrimonio gatero que conformaron Charles Laughton y Elsa Lanchester.




1188. María García García, murciana, nacida el 2 de febrero de 1950, más conocida como Bárbara Rey, fue la actriz, vedette, personaje mediático y presentadora de televisión española que durante los 80’s alcanzó cierta fama como símbolo sexual y aún más notoriedad cuando mantuvo una romántica relación clandestina con el rey Juan Carlos de Borbón, relación siempre negada por los involucrados pero de la cual recién por estos días se conocen unas confirmatorias escabrosas fotografías que vuelven a poner el tema sobre el tapete en España. Pero bueno, que esos asuntos corresponden a la esfera de su intimidad, en definitiva, y lo que aquí queremos destacar es que Bárbara es una orgullosa gatera irredimible como podemos apreciar en esta fotografía en su Instagram por cierto más políticamente correcta que aquellas que protagonizó en la cama junto el rey emérito Juan Carlos I, su hoy confirmado amante.





1187. «En el principio sólo existía un gran abismo llamado Ginnungagap y un árbol cósmico en el fondo, el Yggdrasil. Entre las raíces de este árbol había dos grandes reinos, uno de fuego llamado Muspell, y otro de oscuridad y niebla llamado Nifelheim. Entre ambos reinos estaba Hvergelmir, el gran caldero con agua burbujeante que alimentaba las aguas de los doce grandes ríos que flotaban en el gran abismo lleno de bloques de hielo. En el amanecer de la existencia llamas de fuego del reino de Muspell cayeron sobre los bloques de hielo formando gigantescas nubes de vapor que se elevaron del gran abismo formando los cuatro elementos, el espacio, un gran océano y la tierra, y dando origen a los mundos, bestias, hombres y dioses. Fue entonces cuando las hadas se reunieron en torno a su reina para elegir, entre todos los animales, uno que las representara y protegiera. Todas al unísono escogieron al gato noruego porque era grande, fuerte, musculoso y poseía un largo pelaje que las protegería de las grandes ventiscas polares. El tiempo fluía lentamente en estos nuevos reinos. Los dioses primigenios gobernaban el mundo de los vivos, y también el de los muertos, cuando la diosa nórdica de los Bosques de Noruega, Freyja, primera entre las Valkyrias, hija de Nerthus, la madre tierra, y esposa de Odín, montó en su carro a las puertas de su morada en Sessrumne e instó a sus blancos gatos Bygul (abeja de oro) y Trjegul (árbol de ámbar dorado) a que tomaran las riendas de su carro rumbo al norte, para poder atravesar las serpenteantes auroras boreales que iluminaban los cielos de esas mágicas tierras. Ensimismada en sus pensamientos, sin percatarse de que Thor, el dios del trueno, la seguía despechado por su amor no correspondido, decidido a mantenerla secuestrada en su palacio de Asgard. Pero lo que Thor nunca se ima- ginó fue que sus gatos Bygul y Trjegul iban a defender a su ama con garras y dientes, impidiéndole cumplir su propósito…» (Extraído de las “Leyendas Nórdicas”, ilustradas por Johannes Gehrts)





1186. "Francamente, si existe la reencarnación, sería maravilloso volver y vivir una vida como la que tienen y han tenido todos nuestros gatos: vivir cuidados y atendidos por personas como mi esposa y yo. Me jacto de esto y perdonen la franqueza." (Christopher Walken)





1185. Dora Maar luego de una de las sesiones de análisis que tuvo con Jacques Lacan. La imagen fue captada a fines de los 40’s o principios del 50. Dora había terminado una relación de nueve años con Pablo Picasso y Lee Miller, fotógrafa aprendíz de Man Ray, nada menos, le pidió si podía retratarla evocando aquellos turbulentos días. Estaban en el departamento de Dora en París. Ella acariciaba a su gato y detrás vemos su autorretrato a un costado de la chimenea y arriba uno de los míticos retratos que Picasso hiciera de ella.





1184. Kamwei Fong es un artista malayo que se hizo muy popular por sus divertidas y tiernas pero refinadas ilustraciones de gatos, las cuales quieren simbolizar la alegre visión del asombro infantil. Su estilo conmueve a través de un enfoque minimalista, centrándose en las cualidades expresivas de los ojos y no tanto las expresiones fáciles, con rotundas colas y tupidos pelajes. Utilizando principalmente tintas con micropigmentos negros, Fong les imprime vida a sus simpáticos personajes, en su gran mayoría gatos, imbuyéndolos de una tangible esponjosidad y reflejando a la vez un distintivo carácter.




1183. El actor y director de cine japonés Juzo Itami (1933-1997) con su inseparable gato Kogane-maru. En un ensayo en 1972 Juzo Itami escribió: "Me gustan tanto la dignidad que manifiesta el gato como las implacables formas que tienen de ignorarte. He convivido con gatos desde que nací. Más diría. No recuerdo momento de mi vida en el que no haya habido gatos a mi alrededor. De hecho ni puedo pensarme en una vida sin gatos".





1182. « ¡Qué dura es la vida del gato abandonado! Y más dura aún si se ha de fingir que uno es un gato cualquiera, y no uno que puede leer el pensamiento. Vaya, igual me he pasado un poco, pero sí capaz de evaluar a los bípedos por su aspecto. /////  Este que viene ahora es de los que piensa en dar gato por liebre. Poco de fiar. Mejor me escondo detrás… No, no hace falta. Se arrima a las jaulas de enfrente. Es más de perros que de gatos. Suerte para el perro que escoja; le hará falta. ///// Aquí me siento como las putas esas del barrio rojo, esperando que alguien las escoja. Bueno, con jaulas en vez de cabinas; nosotros esperando alguien a quien podamos hacer compañía; vaya en realidad también como ellas. ///// Esta bípeda que viene ahora sí que busca gato. Vaya, esta es desconfiada, de las que piensa que en todo tiene que haber gato encerrado; como yo. Esta no me dejará salir; mejor me escondo, así, detrás de un travesaño horizontal de la jaula. Aquí detrás no puede verme. Uff… Ya ha pasado. ///// Este que viene ahora… vaya, este no piensa nada. Tiene dificultades para pensar. Mejor no salgo del escondite. ///// ―Oiga joven. ¿Es usted de aquí ¿no?? Pues el gato de la jaula 7,66 se les ha escapado. Ahí no hay ningún gato, aunque se escucha reír a alguien. ///// Vaya, pues sí que pensaba. Era un matemático. En realidad, ya estoy harto de matemáticos, así que mejor haberlo evitado. ///// A ver esta que viene ahora, vaya… esta es de las que piensa que quien con gatos se acuesta, arañado se levanta. No me dejará subirme a la cama. No me descubro. ///// No sé para que me pongo aquí para que me escoja un bípedo, solo he conocido a una que valga la pena. ///// Este, vaya… Este es clarísimamente de los que piensa gato maullador, poco arañador. Nos hace de menos. Y anda que si espera que yo cace ratones. Seguro que no le gusto, pero tampoco me voy a mostrar. ///// Otro día más sin… ¡¡VAYAAA!! ¡Qué sorpresón! Ahora sí que aparezco, y hasta grito, aunque me descubra: ///// ―¡Alicia!... ///// ―¡Cheshire!... » (El Gato “Vaya”, escrito en la senda de Lewis Carroll por Gabiliante, publicado en su imperdible blog https://gabiliante.blogspot.com/ e ilustrado además por el dibujo original coloreado de John Tenniel para “Alicia en el País de las Maravillas”)





1181. El gato Larry es desde 2011 el 'jefe ratonero' de la residencia oficial del primer ministro del Reino Unido en el 10 de Downing Street, puesto al frente del cual atravesó ya varias administraciones. Como miembro del ejecutivo británico Larry cuenta con su propio presupuesto anual de 100 libras para alimentación y cuidados de su salud, aparte de recibir frecuentes regalos desde cada rincón del país. La tradición de contar con un 'jefe ratonero' para preservar el 10 de Downing Street de roedores y plagas viene desde que la residencia fue oficialmente destinada a albergar al primer ministro y su familia.